Los cambios en ganancia solo benefician al 12% de los trabajadores.
Las medidas anunciadas por Macri no llegan a satisfacer las expectativas que creó en campaña, cuando prometió corregir la distorsión del impuesto al trabajo.
Solo para unos pocos. Se benefician el 12% de los trabajadores del país, alrededor de 1.200.000 ocupados.
Con la intención de bajar el nivel de insatisfacción de los asalariados ante magros ofrecimientos en paritarias, el Presidente Macri anunció el jueves los cambios en el impuesto a las ganancias, llevando el Mínimo No Imponible a 30.000 pesos. Aunque la mayoría de los trabajadores del país no entiende de que se trata, pues sus sueldos nunca han estado grabados con este impuesto, la porción que lo tributa ya analiza que luego de las paritarias los beneficios no los alcanzará. A ésto hay que sumar la quita de subsidios y aumento de tarifas, por tanto el poder adquisitivo del salario disminuye.
Por otro lado, el gobierno tomó medidas concretas que afectan los ingresos a las arcas del estado; quita de retenciones al agro, la minería, el champagne y los cigarrillos. Medidas que solo dan beneficios a quienes perciben abundantes ganancias, produciendo más déficit fiscal. Reducción que compromete la disponibilidad de fondos con los que el estado debe cumplir servicios esenciales como salud, seguridad, educación y salarios a empleados del estado.
