Tras los devastadores tornados, Misisipi se prepara para nuevas tormentas
Se estima que unos 4.800 habitantes no tenían electricidad en Misisipi, y cerca de 11.000 hogares y empresas seguían a oscuras en el estado vecino de Alabama, tras el paso de varios tornados asolaran la región y dejaran al menos 25 muertos, en tanto el presidente Biden ordenó desplegar ayuda federal para la zona.
El estado de Misisipi, en el sur de Estados Unidos, se prepara este domingo para nuevas tormentas después de que varios tornados asolaran entre viernes y sábado la región y dejaran al menos 26 muertos, situación que llevó al presidente Joe Biden a ordenar el despliegue de ayuda federal para la zona.
Vientos de más de 160 kilómetros por hora atravesaron este estado del sureste de Estados Unidos dejando «daños devastadores» a su paso, dijo el gobernador, Tate Reeves.
Uno de los tornados fue clasificado preliminarmente como categoría 4 (en la escala Fujita de 5), indicó el Servicio de Emergencia de Misisipi (Msema), informó AFP.
En Rolling Fork, un municipio de unos 2.000 habitantes golpeado duramente el viernes por ese tornado, las calles parecen una «zona de guerra», dijo John Brown, responsable de la Cruz Roja para Alabama y Misisipi.
Filas enteras de casas fueron arrancadas de sus cimientos, las calles están llenas de escombros y se ven algunos automóviles en techos de viviendas, así como árboles derribados y con trozos de metal enroscados en sus troncos.
El sábado comenzó a organizarse la ayuda en esta ciudad.
La Cruz Roja estadounidense se instaló en un edificio de la Guardia Nacional, al que están llegando alimentos, medicamentos y catres.
Algunas personas viajaron decenas de kilómetros para ayudar a los damnificados.
Jon Gebhardt, profesor asistente de ciencias militares en la Universidad de Misisipi en Oxford, a unas tres horas en coche desde Rolling Fork, declaró que llegó a la localidad en la noche del viernes para colaborar en el montaje del centro de asistencia.
Debido al «dolor y la angustia» de los habitantes, «lloré mucho», declaró a la AFP.
El sábado por la noche, electricistas en camionetas recorrieron la ciudad para tratar de restaurar la energía lo más rápidamente posible.
«Vamos a hacer todo lo posible para dar soluciones de vivienda y otros medios para que la gente vuelva a la ciudad lo más pronto posible», dijo Reeves durante una rueda de prensa en Rolling Fork.
El gobernador estaba acompañado por el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, quien dijo haber visto una situación «angustiosa» y también mencionó el cambio climático.
«Vemos cómo aumentan los eventos meteorológicos extremos, tanto en gravedad como en frecuencia», señaló.
Y agregó: «Debemos construir nuestras ciudades de manera de estar mejor preparados y de ser capaces de responder rápidamente y restablecer» la normalidad lo antes posible.
El presidente Joe Biden ordenó este domingo el despliegue de ayuda federal, que se utiliza para levantar viviendas provisorias, reparar otras y entregar préstamos blandos para cubrir pérdidas de propiedades no aseguradas.
Biden evocó el sábado imágenes «desgarradoras» y aseguró que el Estado federal hará «todo lo posible para asistir» a los afectados «mientras sea necesario».
De acuerdo al Msema, para la noche de este domingo se esperan nuevas condiciones climáticas severas.
«Existen peligros ‘reforzados’ de condiciones meteorológicas graves» en algunas regiones del estado, tuiteó y añadió que «ráfagas destructoras y tornados son posibles».
En todo el sur de Estados Unidos, las tormentas eléctricas también fueron particularmente intensas el viernes.
En Alabama, estado vecino a Misisipi, un hombre murió tras volcar su remolque, anunció la comisaría del condado de Morgan.
Los tornados, un fenómeno meteorológico tan impresionante como difícil de predecir, son habituales en Estados Unidos, especialmente en el centro y sur del país.
En diciembre de 2021, alrededor de 80 personas habían perdido la vida después de que fenómenos de ese tipo azotaran el estado de Kentucky.