Por qué se arma el árbol de Navidad el 8 de diciembre
Se acerca la época festiva del año y con ella llega uno de los momentos más esperados en muchos hogares.
La preparación del árbol de Navidad. Con la llegada de diciembre, las expectativas por las festividades de fin de año comienzan a cobrar vida, y el primer gran evento familiar para muchos es la tradicional instalación del árbol navideño.
El armado del árbol de Navidad es un paso crucial en los preparativos para la Nochebuena, una costumbre que une a millones de personas alrededor del mundo. Sin embargo, esta acción no se realiza en cualquier fecha, tiene un significado especial arraigado en la tradición.
Según la costumbre, el 8 de diciembre es la fecha marcada para armar el árbol, el pesebre y decorar los hogares con los adornos deseados. Este día, que este año cae en viernes, coincide como siempre con el feriado por el Día de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María. Luego, el 7 de enero, tras la celebración de los Reyes Magos, es el momento señalado para desmontar toda la decoración navideña.
¿Por qué el 8 de diciembre?
No hay una única explicación, ya que varía de acuerdo con cada cultura. Algunas creencias señalan que los celtas solían decorar un roble durante el solsticio de invierno como símbolo del retorno del sol. Mientras tanto, los nórdicos adoraban un árbol en honor al nacimiento de Frey, el dios del sol y la fertilidad. En Argentina, se dice que la tradición de armar el árbol comenzó en 1807 cuando un irlandés introdujo esta práctica decorando un pino en una plaza pública.
En la actualidad, la decoración del árbol de Navidad incluye una amplia variedad de objetos y elementos, siendo las bolas, guirnaldas, lazos y luces los más tradicionales. Además, la estrella en la punta simboliza la estrella de Belén, representando la fe que debe guiar la vida del cristiano. Aunque los árboles artificiales son populares, algunas culturas prefieren los pinos naturales.
Respecto a la fecha para desarmar el árbol, históricamente ha habido discusiones. Aunque se establece el 7 de enero como el día indicado, muchas personas optan por hacerlo el 6 de enero, coincidiendo con la celebración de los Reyes Magos en Argentina. La mayoría decide retirar la decoración navideña en esta fecha, aunque algunos prolongan este proceso durante varios días o semanas.
El armado y desmontaje del árbol de Navidad se convierten así en rituales que marcan el comienzo y el final de la temporada festiva para muchas familias argentinas, manteniendo viva la tradición que, a lo largo de los años, ha llenado los hogares de alegría y espíritu navideño.
