Milei advierte que aún falta lo “más duro” de su plan de ajuste y limita la asistencia
En un contexto de extrema fragilidad económica y social, el presidente Javier Milei ha lanzado una advertencia sobre lo que considera la fase más desafiante de su plan de ajuste. En una entrevista con Radio Rivadavia, Milei proyectó que marzo y abril serán meses críticos, donde la economía tocará fondo antes de iniciar una recuperación.
El mandatario liberal se mostró optimista sobre la posibilidad de levantar las restricciones cambiarias para mediados de año, lo que, según él, desencadenará un fuerte repunte económico. Destacó los esfuerzos para contener la inflación, aunque reconoció el preocupante deterioro del poder adquisitivo de los salarios.
Restricción de la asistencia estatal y enfoque en los sectores vulnerables
A pesar del dramático escenario económico, Milei ha limitado las intervenciones del Estado para mejorar el poder adquisitivo. Las medidas se han centrado principalmente en duplicar la Asignación Universal por Hijo (AUH), aumentar la Tarjeta Alimentar y elevar la asignación escolar. Sin embargo, ha descartado intervenir en la fijación del Salario Mínimo y Móvil, argumentando que esta es una negociación que debe llevarse a cabo entre trabajadores y empleadores.
Perspectivas sobre el ajuste y sus implicaciones
El presidente Milei ha señalado que la fase más difícil del ajuste se reflejará en el aumento de las tarifas, con incrementos significativos proyectados, especialmente en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Insiste en que el problema fundamental no son los precios de los servicios, sino el nivel de los salarios.
Aunque no ha proporcionado detalles precisos sobre los plazos, Milei confía en que el éxito de su plan de ajuste conducirá a una reducción de las tasas de interés y un aumento de la actividad económica y el empleo. Su visión optimista se extiende hasta las elecciones de 2025, donde espera obtener un respaldo electoral sólido para implementar reformas pro-mercado.
Desafíos económicos y sociales
A pesar de las proyecciones optimistas del gobierno, los datos muestran un panorama desalentador. Según el análisis de expertos como Martín Rozada, la pobreza en Argentina ha aumentado considerablemente, con 3,6 millones de nuevos pobres en el último trimestre de 2023. Este incremento ha afectado incluso a sectores anteriormente considerados de clase media asalariada, evidenciando la profundidad de la crisis.
