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Emergencia sanitaria por Encefalomielitis Equina: Confirmados dos casos en Río Negro y se espera un aumento

El país enfrenta una preocupante situación sanitaria por la propagación de la Encefalomielitis Equina, con la confirmación de dos casos en la provincia de Río Negro.

A fines de noviembre, el Senasa declaró el estado de emergencia ante esta enfermedad que afecta a equinos.

En esta provincia, específicamente en Viedma, se han confirmado dos casos de Encefalomielitis Equina en un caballo y una yegua, residentes en la zona de chacras de Idevi. Los síntomas, aparecidos a principios de diciembre, coincidieron con esta enfermedad viral que se transmite desde aves hasta mosquitos y luego a los equinos. El período de incubación oscila entre 5 y 14 días desde la infección hasta la manifestación de signos clínicos.

El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Castellar y la Universidad Nacional de Córdoba son los encargados de realizar los análisis de las muestras obtenidas de los equinos fallecidos. Sin embargo, se observa un crecimiento de casos sospechosos, cuya confirmación no depende de laboratorio sino de la sintomatología clínica.

Además de los dos casos confirmados en Viedma, se reportan sospechas en Belisle y Valle Azul, zonas donde se han registrado equinos con síntomas similares a los de la capital rionegrina. A la espera de resultados de muestras enviadas, se estima un probable incremento en el número de casos en Río Negro.

Los síntomas característicos de esta enfermedad comienzan con trastornos neurológicos como deambulaciones, hiperexcitación, depresión, hipertermia y decúbito en los equinos.

El Senasa, en su esfuerzo por enfrentar la situación, ha comunicado la colaboración con cámaras de productos veterinarios y laboratorios para aumentar la producción y distribución de vacunas. La prioridad es suministrarlas en áreas con mayor incidencia de la enfermedad.

Entre las medidas preventivas destacadas se encuentran el control de mosquitos, la vacunación de equinos, la notificación inmediata al Senasa ante signos nerviosos en los animales, la restricción de movimientos de equinos, la evitación de concentraciones de estos animales y el seguimiento riguroso del calendario de vacunación.

El Senasa hace un llamado a los actores relacionados con la producción y la sanidad equina para reforzar la revisión clínica periódica, extremar medidas de bioseguridad y aplicar rigurosamente procedimientos de higiene y desinfección para prevenir la propagación de la enfermedad.

Ante comportamientos inusuales en los equinos, se insta a contactar al Senasa a través de múltiples canales como oficinas presenciales, números telefónicos, aplicación móvil y correo electrónico, con el objetivo de reportar cualquier anomalía observada.

La emergencia sanitaria por la Encefalomielitis Equina demanda una acción coordinada y urgente de todos los sectores involucrados para contener su expansión y proteger tanto a los equinos como a la población en general.

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