«Las inundaciones primero y las elevadas temperaturas después provocaron una caída de más del 30% en la producción de leche, como fue el caso de Santa Fe», indicó Pablo Villano, presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme) y añadió: «Existían entregas pendientes de 2018 por ventas en el exterior que debían concretarse».
Según un relevamiento de ámbito.com, en las heladeras de algunas cadenas líderes se observan espacios vacíos que antes eran ocupados por distintos productos, en particular por leche de segundas marcas.
Villano pronosticó que “la situación se normalizaría en las próximas semanas porque mejoraron las condiciones de producción en los tambos, porque definitivamente es un tema estacional”.