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Cuando el silencio no es salud: Torroba reclama que la dirigencia dé el “ejemplo” y se “ponga a la cabeza” del reclamo de las mujeres

La falta de reacción de la Unión Cívica Radical en torno a la grave denuncia de abuso que pesa sobre el senador Juan Carlos Marino, empieza a bullir en el seno partidario.

Van cuatro días del hecho y contando: ninguna autoridad del partido sale aún a pronunciarse. Pero, al igual que las integrantes de la Red de Mujeres Radicales, el ex diputado nacional Francisco Torroba esquivó la siesta de la dirigencia para repudiar el caso, reclamar una investigación y enviar un mensaje contundente: “Es obligación de toda la dirigencia política, religiosa, empresarial, sindical y de los formadores de opinión ponerse con el ejemplo a la cabeza de los necesarios e imperiosos cambios sociales que estamos atravesando”.

La denuncia de la empleada del Congreso Claudia Guebel en contra de Marino y sus asesor Pedro Fiorda parece chocar en La Pampa contra un muro de silencio. Es cierto que el senador no regresó a la provincia desde el jueves, que no atendió su teléfono, pero también es cierto que el presidente de la Convención, Mauricio Agón, viajó a Buenos Aires. Ya no hay excusas para tanta omertá.

Torroba, quien hasta hace poco impulsó su candidatura a gobernador junto a Marino y Daniel Kroneberger, a la postre el hombre radical surgido del consenso, dialogó con el medio pampeano dosbases sobre el episodio que conmueve al partido y, a la vez, se enmarca en un fenómeno que nos replantea como sociedad: “Asistimos en nuestro país a una andanada de denuncias por abuso o acoso sexual, delitos que afectan la libertad, dignidad, seguridad e integridad física y psíquica de las mujeres, hechos que repudiamos enérgicamente”.

En ese sentido, Torroba dejó en claro que como representante de la UCR “valoramos la profunda valentía de las mujeres que denuncian esta clases de delitos, muchas veces en una situación de inferioridad”. Y agregó: “Entendemos que todos casos deben ser investigados con las garantías del debido proceso y sin ningún privilegio. Es necesario que se haga justicia con rapidez para condenar a los delincuentes y desalentar perversas prácticas arraigadas en nuestra sociedad, que deben erradicarse imperiosamente”.

Por eso, para el ex intendente y legislador, el desafío incumbe a todos, incluyendo a la dirigencia partidaria, dado que en medio está en juego “una lucha que involucra a mujeres y hombres por una sociedad más justa”.

Fuente
Dos Bases
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