Crisis en el equipo económico: «El fallo de YPF nos dejó en bolas»
El escenario económico de Argentina se enfrenta a una presión significativa con la obligación de pagar USD 16000 millones en poco más de dos semanas, una suma que resulta completamente inviable para el país en estos momentos.
El incumplimiento de esta sentencia implica cerrar prácticamente las puertas al financiamiento externo, una situación alarmante y sin precedentes que sacude al equipo económico del gobierno.
La jueza del segundo circuito de Nueva York, Loretta Preska, estableció como fecha límite el 10 de enero para cumplir con el pago de los USD 16000 millones en el juicio por la expropiación de YPF. Esta decisión desestimó la solicitud de postergación por parte de la administración, lo que deja a los demandantes del caso habilitados para solicitar embargos en caso de incumplimiento.
Este revés legal ha golpeado fuertemente al equipo económico del gobierno, sorprendiéndolos sin preparación alguna. Representantes de la oposición como Juntos por el Cambio expresaron su preocupación ante esta situación, señalando que el fallo «nos dejó en bolas», evidenciando el impacto y las repercusiones negativas en el programa económico en curso.
Las consecuencias de no pagar esta sentencia implican un cierre efectivo a cualquier posibilidad de obtener financiamiento externo, ya que se deterioraría la confianza en la capacidad del país para cumplir con fallos judiciales internacionales. Incluso se pone en duda el respaldo del FMI en esta coyuntura.
El gobierno, por su parte, se muestra en una posición de análisis y evaluación de alternativas para afrontar este desafío. El vocero presidencial, Manuel Adorni, aseguró que Argentina cumplirá con sus compromisos y contratos, aunque sin proporcionar detalles concretos sobre las medidas que se tomarán desde el Ejecutivo.
Este juicio, ganado por el fondo buitre Burford Capital, que adquirió los derechos a litigar del grupo Petersen, tiene su origen en diferencias por el tratamiento desigual entre el grupo español Repsol y la familia Eskenazi en la expropiación de YPF. Este revés judicial ha sido interpretado como una consecuencia de la falta de previsión y acción por parte del equipo económico.
Exfuncionarios con experiencia en este caso destacan la falta de diligencia del equipo gubernamental, que no actuó a tiempo ni estableció comunicación con el estudio legal que representa a Argentina en Nueva York.
