Antes de salir de vacaciones, tené en cuenta esto

Como todos los años, los meses de diciembre, enero y febrero concentran el mayor flujo de tránsito vehicular en las rutas del país con motivo de las vacaciones de verano. Salir con el auto en condiciones se transforma en una cuestión primordial para no sufrir contratiempos durante el descanso.

Más allá del estado que presentan las rutas de nuestro país es importante no agregar más peligro al tránsito saliendo con un vehículo que no está al 100 por ciento de su capacidad.

Las sugerencias para aquellos que van a viajar son siempre las mismas y están sumamente difundidas, pero nunca está de más refrescar algunos conceptos a tener en cuenta antes de salir a la ruta. 

Cuáles son los puntos a los que se debe prestar atención para que el descanso no se transforme en una tortura.

• Realizar la verificación técnica. Pasar por este control no sólo es una obligación anual para cada vehículo, sino que se transforma en un buen comienzo para tener un diagnóstico certero de sistemas fundamentales que nos permitan viajar seguros.

Aquí se revisan luces, suspensión, amortiguación, frenos, gases de escape, tren delantero en general y que el matafuegos esté cargado como corresponde y sin que se haya vencido el período de validez de la carga. Demás está decir que cumplir con este trámite nos puede proteger de una multa en un control de tránsito o evitar que, ante un siniestro, el seguro nos retacee la cobertura. Realizar la VTV nos va a dar tranquilidad personal para el viaje más allá de los costos que insume este control.

• Revisar las cubiertas. Los neumáticos de un vehículo deben estar en perfecto estado, con una buena profundidad en el dibujo, no deben transmitir vibraciones al volante y tendrán que responder adecuadamente ante una frenada calculada o de emergencia.

Para saber si las cubiertas tienen el dibujo adecuado hay que ver que el desgaste no llegue hasta el testigo que está dentro de las canaletas del mismo neumático (ver foto). También hay que tener en cuenta la edad de los neumáticos, ya que con el paso de los años pierden sus cualidades y se recomienda cambiarlos cada 5 años si es que la banda de rodamiento no se gastó antes de ese tiempo.

• Revisar fluidos. En verano, la exigencia del vehículo en un viaje largo es mucho mayor que el uso en ciudad en tramos cortos. Es necesario que el sistema de refrigeración funcione a la perfección. La sugerencia es revisar periódicamente el nivel de líquido refrigerante y ver que esté ubicado entre las marcas de máximo y mínimo que están en el recipiente dentro del vano motor.

Si el conocimiento sobre un vehículo por parte del propietario es escaso o incluso son temas que directamente no le interesan, entonces la alternativa es que los niveles de los fluidos de refrigeración, frenos, dirección hidráulica y aceite de motor sean revisados en una estación de servicio, en algún comercio dedicado a la actividad, o en un taller mecánico. Una buena sugerencia es hacerlo con tiempo antes de salir de viaje, ya que en época estival la demanda para reparar o acondicionar vehículos aumenta y ya no es tan fácil conseguir un turno inmediato para cumplir con estas tareas.

• Controlar pérdidas. Ya con todos los niveles de los fluidos en condiciones, un buen ejercicio es espiar debajo del motor y observar que no haya pérdidas de ningún tipo, incluso en la parte de atrás del vehículo donde está el tanque de combustible. Si todo está en orden, entonces se podrá salir tranquilos.

• Aire acondicionado. Aquellos vehículos que tengan aire acondicionado (hoy la mayoría) es aconsejable probar el sistema ya en esta época y comprobar que todo funcione correctamente.

Si el flujo de aire fresco no es suficiente, lo más probable es que le falte gas refrigerante al sistema y será necesario concurrir a un sitio especializado para solucionarlo. En este rubro en particular también la demanda crece en esta época y hay que armarse de paciencia para conseguir un turno para recarga o control del sistema de aire acondicionado.

Si se viaja en una jornada muy calurosa, algo habitual en el verano, esta prestación será muy bienvenida para acondicionar el interior del automóvil. Una recarga de aire acondicionado ronda hoy los 2.000 pesos.

• Distribución. En vehículos cuya distribución funcione a través de correa dentada, tener en cuenta que si se está cerca de cumplir el kilometraje para el recambio de este elemento, lo mejor será realizarlo antes de viajar y con un mecánico de confianza.

• Matafuegos. No olvidar llevar un matafuegos en condiciones de funcionamiento adecuadas para utilizar en caso de un incidente propio o colaborar en alguna situación que involucre a terceros. Este elemento como ya se indicó se controla cuando se realiza la verificación técnica y no debe estar vencido.

• Rueda de auxilio. Un elemento poco tenido en cuenta… hasta que se lo necesita. Revisar, calibrar o reparar el neumático de auxilio para tenerlo listo en caso de un pinchazo o reventón.

• Botiquín. Otro elemento que debería estar presente en caso de necesidad. En los comercios del rubro se venden botiquines ya armados con productos que pueden ser de ayuda para sortear una emergencia.

• Documentación. Parece una cuestión menor alertar sobre este punto pero lo hacemos. Revisar que toda la documentación esté en regla, sobre todo si el viaje a realizar es a países limítrofes.