Economía

Un gran alivio para las cervecerías artesanales

Después de dos meses de gran preocupación e incertidumbre ante la decisión de retomar el aumento del impuesto interno a las bebidas alcohólicas que pasaría, en el caso de la cerveza del 8% al 17%, la Cámara de Diputados resolvió que el porcentaje se mantendrá estable. Para nosotros y para las cámaras que nos nuclean fue una sorpresa muy grande tras tantos esfuerzos para que escuchen nuestro punto. 

Por Pablo Fazio, CEO de la cervecería Otro Mundo y miembro de la Cámara de Cervecería Artesanal de Argentina.

Después de reiterados reclamos a lo largo y ancho de todo el país, logramos audiencias con el Ministerio de Producción y el Ministerio de Hacienda, donde se nos aseguró que el aumento finalmente no se iba a activar. Poco menos de unas semanas después, veíamos con incredulidad como se retomaba la iniciativa, con el agravante que se aplicaría efectivamente sólo para las cervezas.

Los argumentos del Gobierno para fomentar el aumento se basaban en recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, las cuales sugieren aumentar el impuesto de las bebidas alcohólicas dependiendo de la graduación que las mismas poseen. Pero esta premisa no se estaba cumpliendo, ya que la cerveza tiene menos graduación que el vino o el champagne y, sin embargo, estos dos últimos dos no son alcanzados por impuesto interno alguno.

El mercado cervecero está divido en Argentina en dos grandes grupos, Por un lado, el sector industrial, conformado por tres empresas multinacionales que representan el 98% del mercado y emplean de manera directa a 7.900 personas; por el otro el sector artesanal, compuesto por entre 1.200 y 1.500 empresas que representan solamente el 2% del mercado. Estos últimos, emprendimientos diseminados federalmente por todo el territorio nacional, que generan más de 9.000 fuentes de trabajo directas; empresas con impacto local y regional con especial énfasis en Bariloche, Córdoba, Mar del Plata, Buenos Aires y otro sinfín de localidades del interior del país.

Adicionalmente, nuestro reclamo radicaba en que dicho incremento de la alícuota de la cerveza iba a ser abrupto y afectaría directamente nuestra actividad. Todos los cerveceros artesanales manifestamos durante dos meses nuestra preocupación por el carácter regresivo de dichas medidas y del impacto negativo que ocasionarán en la actividad; perjudicando el consumo y por sobre todas las cosas desalentando la formalización y las inversiones de un sector que en la actualidad genera aproximadamente 10.000 puestos de trabajo en todo el país.

Ante este escenario, nos encontrábamos hasta el pasado lunes, cuando la Cámara de Diputados recogió nuestra propuesta de establecer un régimen de tributo que sea diferenciado. Es decir, que las grandes empresas productoras de cervezas tendrán un aumento del impuesto que se elevará al 14%, mientras que para las cervezas artesanales se mantendrá en el 8%. Esperamos ahora por el tratamiento de la iniciativa en el Senado de la Nación reciba una respuesta positiva y que finalmente sea sancionada y reglamentada la norma.

Es una noticia que nos produce un gran alivio ya que la situación actual de cara al nuevo año será más positiva. Somos un sector emergente en un momento en el que el mercado se encuentra en pleno crecimiento y con consumidores receptivos a la novedosa, múltiple y colorida cantidad de propuestas que nacen en cada rincón del país.

Creemos realmente importante haber encontrado por parte de las autoridades, la comprensión, sensibilidad y el acompañamiento necesarios para generar las condiciones para que este pujante fenómeno pueda desarrollarse en un marco de previsibilidad, protección y fomento.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba