Catamarca bajo la lupa: obreros hallaron urnas funerarias con restos humanos de extraña morfología
Un hallazgo tan misterioso como inesperado sacudió la tranquilidad del departamento Belén, al noroeste de la provincia de Catamarca. Mientras realizaban trabajos de excavación para la instalación de una red de agua potable en la jurisdicción de San Fernando, un grupo de obreros dio con dos urnas funerarias que contenían restos humanos. Sin embargo, lo que parecía ser un descubrimiento arqueológico común tomó un rumbo inesperado cuando se detectó una particularidad inquietante: uno de los cráneos no responde a las características humanas convencionales.

La estructura ósea de uno de los cráneos, hallado dentro de una de las urnas, presenta una morfología singular que desató la sorpresa de los trabajadores y alimentó una ola de especulaciones en la zona. Algunos testigos se animaron a hablar de “hombres hormiga” y hasta deslizaron hipótesis sobre civilizaciones desconocidas.
Ante el hallazgo, se activó el protocolo correspondiente y se notificó de inmediato al área de antropología de la provincia. Especialistas en la materia se estarían trasladando al sitio entre el lunes y el martes próximo, con el objetivo de iniciar una investigación en profundidad sobre la procedencia y características de los restos.
El sitio fue preservado y esperan a los expertos
Por el momento, el lugar del hallazgo fue vallado y permanece bajo resguardo para evitar cualquier tipo de intervención que comprometa el material arqueológico. De acuerdo con los primeros relevamientos, una de las urnas contenía un esqueleto humano aparentemente completo, mientras que la otra alojaba restos parciales, cuya naturaleza también será objeto de análisis por parte de los expertos.
Este tipo de descubrimientos no es nuevo en una provincia rica en historia precolombina como Catamarca, aunque la peculiaridad del cráneo encontrado genera una expectativa poco común incluso entre los profesionales del área.
Desde la dirección de Patrimonio y Antropología aún no brindaron declaraciones formales, pero trascendió que se están preparando para una intervención cuidadosa. La comunidad científica espera poder determinar el origen, la antigüedad y las posibles causas de la deformación del cráneo hallado, una práctica que en otras culturas antiguas fue común, pero que siempre despierta interés y curiosidad.
Mientras tanto, en San Fernando el ambiente se tiñe de misterio y orgullo. Los vecinos siguen con atención cada novedad, con la esperanza de que el hallazgo permita arrojar nueva luz sobre la historia milenaria que duerme bajo la tierra catamarqueña.