Día de la No Violencia contra la Mujer: «Se puede salir, hay muchas personas que quieren ayudarte»
Andrea es el nombre ficticio de una mujer de Viedma, una de las tantas que debió atravesar situaciones de violencia de género pero que pudo salir de ese infierno y volver a sonreír.
No quiere dar su nombre, porque aún quedan restos de ese miedo, pero está decidida a dejar atrás esa historia.
Fueron dos las situaciones “límite” que sacudieron su vida y la llevaron a tomar la decisión.
“Me hizo el ‘click’ ver que uno de mis hijos reaccionaba igual que su papá, y eso me llevó a querer cambiar. No quería llegar a que mi hijo en el futuro reaccione así con las mujeres”, contó.
En otra ocasión, agregó: “Me negó la alimentación, al punto que mi bebé de dos meses fue internado por desnutrición. Estando en el hospital, dio la casualidad que mi compañera de habitación se venía escapando de su pareja, que llegó a golpearla frente a nosotros, en el hospital. Le pregunté su situación y era como describir a mi ex pareja: las personas violentas reaccionan de la misma forma”.
Hoy, transitando su nueva vida, junto a sus hijos, alienta con su testimonio a las personas que están en situación de violencia: “Aunque te ataquen en lo psicológico, hay que pensar en los hijos, en uno mismo”.
Aunque reconoce que no fue una decisión sencilla y que, incluso, su propia familia le dio la espalda, ella encontró ayuda y contención.
“Hay muchas posibilidades y un montón de personas que te quieren ayudar, nada es imposible, se puede salir de la violencia”, expresó convencida de haber tomado la mejor decisión.
Indicó que, “si no fuera por mis hijos, terminaba esperando a que me mate”.
Asistencia estatal
A través de la línea 144, gratuita y disponible todo el año, un equipo de profesionales recibe denuncias y brinda asesoramiento y contención a las víctimas.
Además, Río Negro destina recursos para asistir a las mujeres en situación de violencia y sus familias, tales como ayudas económicas, asistencia profesional y alojamiento en refugios, con acompañamiento permanente, para garantizar el pleno cumplimiento de los derechos de las mujeres, su recuperación y autonomía.
