Murieron dos bebes por deshidratación en Salta
Se trata de un nene de 9 meses y una nena de 11 meses. Ambos ingresaron al hospital con cuadros de diarrea y deshidratación.
Dos bebés de menos de un año de la comunidad wichí de Salta fallecieron en las últimas horas. Ambos ingresaron al centro de salud con un cuadro de diarrea y deshidratación.
Así lo informó el cacique de la comunidad La Puntana, Pablo Solís. Señaló que una de las víctimas era su nieto, Leonardo Pérez, de 9 meses, quien falleció en el Hospital Materno Infantil de Salta capital.
La identidad de la otra niña, de 11 meses, permanece reservada. La menor falleció en el Hospital de Tartagal tras ingresar con diarrea, vómitos y un cuadro de deshidratación. También pertenecía a la comunidad wichí La Puntana.
El niño, por su parte, había permanecido internado en el Hospital de Santa Victoria Este durante una semana, le pusieron cuatro vacunas y le dieron el alta. Luego debió ser trasladado a la capital de la provincia el martes, tras agravarse su cuadro mientras permanecía internado nuevamente en el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal.
Según expresó la abogada de la Secretaría de Asuntos Indígenas, Sandra Ruiz, ingresó con un cuadro de deshidratación y sepsis, pero cuando lo recibieron en el Materno Infantil, agregaron que también tenía covid, por lo que su madre de 22 años, quedó aislada.
Solís detalló que en el primer nosocomio, “no nos explicaron qué le pusieron y después la condición de salud del bebé empeoró, por lo que fue derivado de nuevo desde el centro sanitario de su comunidad al Hospital de Santa Victoria Este». Tampoco recibió el parte médico de su nieto, aunque aseguró haberlo reclamado “hasta al ministro de Salud Pública de la provincia”, Juan José Esteban, que “no contestó nada”.
Se trata de una localidad al norte de la provincia, donde se encuentran varias comunidades originarias distribuidas en zonas rurales de ese y otros departamentos aledaños. Son zonas muy calientes, donde las temperaturas alcanzan cifras altísimas y las lluvias son escasas. Además, tampoco cuentan con servicios básicos como el agua potable y la mayor parte de las viviendas son construcciones muy precarias.
