Luz de Esperanza: velas que iluminan vidas y promueven la inclusión
En el Barrio 31 de la Ciudad de Buenos Aires, la asociación civil sin fines de lucro Luz de Esperanza desarrolla un modelo de inclusión social y laboral que transforma vidas. A través de talleres de producción artesanal, promueve la reinserción de personas en tratamiento por consumo problemático y en situación de vulnerabilidad. Su iniciativa Aroma Box, una línea de velas aromáticas solidarias, combina calidad, bienestar y compromiso social.

Luz de Esperanza propone una alternativa real y profunda: transformar la vida de personas que transitan procesos de recuperación, dándoles la posibilidad de integrarse al mundo laboral a través del trabajo artesanal.
Desde 2012, más de 250 jóvenes y adultos han participado en los talleres que esta organización impulsa en la Villa 31 y en el Centro Barrial Padre Carlos Mugica del Hogar de Cristo, en la Villa 3. Allí, en un entorno que respeta los tiempos individuales y promueve el acompañamiento comunitario, se construyen mucho más que velas: se construyen futuros posibles.
Entre los distintos programas que desarrolla Luz de Esperanza, el Emprendimiento de Velas Artesanales se convirtió en uno de los pilares de su propuesta, regalos empresariales con impacto social. Y dentro de este proyecto, Aroma Box destaca por su enfoque innovador y solidario.
Se trata de una suscripción mensual pensada para quienes valoran el bienestar personal y, al mismo tiempo, desean colaborar con una causa transformadora. Cada caja contiene velas aromáticas de alta calidad, elaboradas por jóvenes en proceso de recuperación, que buscan salir adelante a través del trabajo digno.
Los talleres que impulsa la organización no son solo espacios de producción: son también entornos terapéuticos. Las personas que participan llegan derivadas por organizaciones sociales que las acompañan en sus procesos de tratamiento. En los espacios de carpintería, costura y fabricación de velas, se promueve una experiencia integral de inclusión: se enseñan oficios, se desarrollan habilidades blandas y se fortalecen valores fundamentales como la responsabilidad, el compromiso y el trabajo en equipo.
Además, la comercialización de los productos permite sostener económicamente el ciclo productivo, aportando a la sustentabilidad del proyecto sin perder su raíz social.
Este enfoque de economía social y solidaria convierte a Luz de Esperanza en un modelo inspirador para otras comunidades del país que buscan generar oportunidades genuinas donde más se necesitan.
El trabajo de Luz de Esperanza no sólo transforma a quienes participan directamente de los talleres. También interpela a quienes adquieren sus productos, invitándolos a ser parte de un círculo virtuoso de consumo consciente.
En un contexto donde crece el interés por los regalos corporativos con sentido y los productos sustentables, iniciativas como Aroma Box son cada vez más valoradas por empresas, comercios e instituciones que desean alinear sus acciones con valores sociales.
Desde su creación, Luz de Esperanza ha demostrado que es posible tender puentes entre los márgenes y el centro, entre la exclusión y la dignidad. Con cada vela que se enciende, se ilumina un camino de esperanza, esfuerzo y transformación colectiva.