Claves para elaborar y guardar la cena de Año Nuevo durante la ola de calor
Ante las elevadas temperaturas en varios puntos del país, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recomendó tomar ciertos recaudos para elaborar y guardar la cena del 31 de diciembre o el almuerzo del 1 de enero para evitar enfermedades relacionadas con el mal manejo de los alimentos.
«Una incorrecta manipulación de las carnes y vegetales sin los recaudos necesarios de su refrigeración contribuye a que, en ocasiones, se cumplan las condiciones para que se produzcan sorpresas poco gratas como las intoxicaciones alimentarias», explicó el Senasa en un comunicado.
Una de estas enfermedades es el síndrome urémico hemolítico (SUH), causada por algunas cepas de la bacteria Escherichia coli que suele estar presente en la materia fecal de animales y personas, y que afecta el sistema renal y urinario de los humanos, alertó el organismo.
Por eso, desde el Senasa se emitieron recomendaciones para evitar problemas en los alimentos que deriven en afecciones a la salud.
Al hacer las compras, es aconsejable dejar para el final los alimentos congelados y perecederos como leche, queso, pescado y carne; no colocar en el mismo lugar la comida preparada y caliente con productos frescos o congelados, y observar que se mantenga la cadena de frío en productos refrigerados o congelados.
En la cocina, utilizar siempre utensilios limpios, no emplear cubiertos usados en otro alimento sin lavarlos previamente y evitar tocar la comida con las manos si no están limpias.
También lavar y desinfectar las superficies y equipos antes y después de cocinar, lavar las frutas y las hortalizas minuciosamente, no utilizar alimentos después de la fecha de vencimiento y conservar la cadena de frío de los alimentos que se van a consumir.
El Senasa aconseja mantener y conservar los alimentos crudos separados entre sí, y a su vez de los cocidos y de los listos para consumir; no almacenar productos cárnicos crudos de diferentes especies en contacto directo entre sí, y usar equipos y utensilios diferentes para manipular alimentos crudos y cocidos.
Además, no dejar alimentos cocidos a temperatura ambiente por más de dos horas, no descongelar los alimentos a temperatura ambiente y nunca volver a congelar algo ya descongelado.