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Bomberos luchan contra las llamas en Córdoba

Mas de 300 bomberos y varios aviones hidrantes intentan sofocar los dos grandes incendios forestales que permanecen activos en una zona serrana de la provincia de Córdoba, en medio de condiciones adversas por las altas temperaturas.

Un frente de fuego de unos 20 kilómetros se encuentra en Alpa Corral, al norte del Dique Los Molinos.

Otro incendio originado en el área de Cuchi Corral -una quebrada al norte del Valle de Punilla- pasó al área natural de Characato devorando bosque nativo y ahora va en dirección a Estancia La Candelaria, la más extensa de las estancias jesuíticas en esa provincia, ubicada en la llamada Sierra Grande y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

La justicia investiga si los incendios fueron intencionales. Su propagación en las ultimas semanas se ha propiciado por la sequía que sufre Córdoba este año, considerado el de menos lluvias desde 1955.

“La zona que se está quemando está entre los 10 lugares del mundo de mayor dificultad con el fuego, al nivel de California, España, Portugal, Australia, por citar algunos, que tienen realmente incendios muy complicados también”, afirmó el titular de Defensa Civil de la provincia, Diego Concha, en declaraciones a medios locales.

Desde el primer día de incendios, el Gobierno Nacional puso a disposición todos los recursos para combatir el fuego en cada provincia. El Plan Nacional de Manejo del Fuego brinda asistencia a requerimiento de las provincias.
En el caso de Córdoba, desde los incendios de agosto hay cinco aviones hidrantes operando, y desde septiembre, siete.
Por otra parte desde hace cuatro semanas hay ofrecimiento de brigadistas al gobierno de Córdoba, por parte del Estado Nacional. Finalmente, hoy al mediodía Córdoba los requirió y a las 17 llegarán los primeros 64. Informaron fuentes oficiales.

Concha señaló que en 2009 y 2013 se generaron graves incendios en Córdoba pero nunca presenció focos tan devastadores como los actuales.

Según el último informe del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, además de Córdoba -donde desde principios de año se destruyeron cerca de 50.000 hectáreas a causa de distintos focos ígneos- otras nueve provincias donde las lluvias han escaseado son afectadas por incendios activos o controlados parcialmente, entre ellas las norteñas Jujuy, Corrientes, Salta, Catamarca y Tucumán.

El miércoles más de 400 bomberos voluntarios junto con aviones hidrantes y dos helicópteros lucharon contra las llamas en la zona serrana cordobesa en medio de temperaturas superiores a los 35 grados centígrados y con un fuerte viento norte que complicó la tarea. Se registraron decenas de evacuados.

Claudio Vignetta, secretario de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil de Córdoba, dijo que “hay indicios que señalan que ayer el fuego fue encendido en tres lugares diferentes”.

Recurrentes incendios forestales azotan a la provincia desde hace dos meses.

A fines de agosto un hombre fue detenido acusado de provocar un incendio cerca de la ciudad cordobesa de Capilla del Monte y miles de hectáreas de las serranías del Valle de Punilla fueron devoradas por las llamas.

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