Malbrán advierte que «fumigar debería ser la última opción contra el dengue, porque los mosquitos muestran resistencia»
En medio de la preocupación por el crecimiento del dengue en Argentina, el Centro Nacional de Diagnóstico e Investigación en Endemoepidemias (CeNDIE) ha emitido una advertencia contundente: la fumigación masiva debería ser la última alternativa en la lucha contra esta enfermedad, ya que los mosquitos transmisores están mostrando resistencia a los insecticidas.
La investigación del CeNDIE, que comenzó en 2019, ha arrojado datos reveladores sobre la situación actual. Este año, el dengue ha alcanzado niveles históricos en el país, marcando el primer año consecutivo de epidemia. Incluso ha llegado hasta la provincia patagónica de Neuquén, señalando la urgencia de abordar este problema de manera efectiva y sostenible.
Según el último boletín epidemiológico del Ministerio de Salud de la Nación, se han notificado más de 250,000 casos de dengue en lo que va del año, con un trágico saldo de casi 200 muertes. Estas cifras son alarmantes y subrayan la necesidad de tomar medidas urgentes.
El CeNDIE, en colaboración con la Red Argentina de Vigilancia a la Resistencia a Plaguicidas, está llevando a cabo un proyecto crucial para describir y analizar la resistencia de los mosquitos Aedes aegypti a los plaguicidas. Esta investigación es fundamental para comprender la dinámica de la resistencia y desarrollar estrategias efectivas de control.
En una entrevista exclusiva con Noticias Argentinas, la directora del CeNDIE, Mariana Manteca Acosta, compartió información crucial sobre los hallazgos y recomendaciones del estudio. Destacó que el mal uso o sobreuso de los insecticidas está contribuyendo a la resistencia de los mosquitos, lo que plantea desafíos significativos para el control del dengue.
Manteca Acosta enfatizó la importancia de adoptar enfoques integrales en la prevención del dengue, que van más allá de la fumigación. Instó a los municipios y a la población en general a concentrarse en la eliminación de los sitios de cría de los mosquitos, que pueden estar presentes en cualquier objeto que acumule agua en el entorno urbano.
Es crucial comprender que la fumigación indiscriminada no solo es ineficaz, sino que también puede contribuir a la resistencia de los mosquitos. Por lo tanto, es fundamental adoptar estrategias basadas en el conocimiento científico y la colaboración comunitaria para controlar esta enfermedad.
El aumento de los casos de dengue en Argentina está vinculado a una serie de factores, como la crisis climática, la urbanización y la globalización. Estos fenómenos han facilitado la propagación del mosquito Aedes aegypti a nuevas áreas, incluidas regiones antes consideradas no endémicas.
A medida que enfrentamos el desafío del dengue en un contexto de cambio climático y urbanización acelerada, es imperativo adoptar enfoques innovadores y colaborativos para proteger la salud pública. La prevención del dengue no es responsabilidad exclusiva de los gobiernos o de los expertos en salud, sino de toda la comunidad, que debe trabajar unida para eliminar los criaderos de mosquitos y reducir el riesgo de transmisión.
