Nacido en San Isidro, donde transcurrieron sus primeras etapas, y más todavía, en el Club Náutico, Lange es un prestigioso ingeniero naval y un regatista de foja copiosa y gloriosa. Como diseñador, se ha especializado en la clase Optimist, la que en la Argentina se hizo notoria en 1974, cuando un adolescente Martín Billoch ganó la Copa del Mundo, un logro que diversos deportistas nacionales repitieron nada menos que once veces.
En los Juegos Olímpicos persiste desde los de Seúl 88, hasta completar un total de cinco, matizados con las ausencias en Barcelona 92 y Londres 2012. Ni en Seúl, ni en Atlanta 96 ni en Sidney 2000 subió al podio, pero sí en Atenas 2004, en Pekín 2008, bronce por dos, cuando rozó la excelencia la dupla con el correntino Carlos Espínola, «Camau», medallista argentino récord con la asombrosa marca de cuatro, y, finalmente, medalla de oro en Río 2016, junto a Cecilia Carranza en la modalidad de Nacra 17.
Los Juegos de Río 2016 tienen para él un plus emotivo: es la primea vez que comparte una competencia de esta magnitud con sus hijos Yago y Klaus, que participan en la clase 49er masculino.