El gobierno prepara un plan de reequipamiento vial para municipios
La última compra se hizo hace una década y fue financiada por el BID. Ahora analizan hacerla a través de la banca privada o financiamiento nacional.
La desinversión del equipamiento vial en los municipios es dramática.
La última compra grande y general en Río Negro se cumplió hace una década y, posteriormente, cada gobierno local compró, como pudo, alguna unidad para incorporar.
Ahora, la administración provincial trabaja en un instrumento y una operación crediticia para cumplir con un plan de reequipamiento, simplificando los trámites de la requerida autorización ante Nación, garantizando el recupero y mejorando las condiciones del crédito.
La provincia ya recibió pedidos de colaboración de varios municipios para lograr esas adquisiciones, y el gobernador Alberto Weretilneck instruyó al presidente de la bancada oficialista, Alejandro Palmieri que se ocupe del marco legal y evalúa opciones de financiamiento.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) financió la última gran renovación del parque vial de los municipios en el 2005, con la participación provincial. Se trataba del programa de “Servicios Municipales”, destinado al apoyo de los municipios “en sus acciones dirigidas al saneamiento de las finanzas públicas”.
Ahora, ese organismo mundial ratificó que ya no dispone de esa operatoria.
En ese caso, las opciones se reducen a la banca privada o un esquema de financiamiento nacional.
Simultáneamente, los gobiernos locales abrieron individualmente gestiones con Nación Leasing, a partir de la relación institucional y política con el dirigente rionegrino del Pro, Juan Martín, hoy uno de los directores de esa entidad.
Cipolletti y Bariloche habrían avanzado aunque, también, es cierto que las tasas ofrecidas lejos están de constituirse en propuestas beneficiosas.
Por eso, frente a pedidos de los intendentes, la administración nacional analiza condiciones especiales.
El acceso a un crédito bancario exige a los municipios que presenten sus tres últimos ejercicios y proyecciones anuales, incluyendo autorización provincial y del ministerio de Economía nacional. La intermediación de la administración rionegrina simplificaría esas gestiones, concentrando la operación y el pago, con garantía propia, y así mejorando las condiciones del desembolso.
En el 2005, la mayoría de los municipios adhirieron al programa de financiamiento del BID, que permitió un operación de más de un centenar de unidades, como motoniveladoras, palas cargadoras, camiones volcadores y compactadores, tanques regadores, tractores, entre otros. Esa operación superó los 4 millones de dólares, es decir, casi unos 60 millones actuales.
Una motoniveladora tiene hoy un valor de 3 a 4 millones de pesos, que representa –por ejemplo– la mitad de la masa salarial mensual de Villa Regina y, obviamente, supera esa partida mensual de los municipios menores.
